Una década después de la grabación del piloto de "Vergüenza", una serie que pasó de cadena en cadena sin encontrar su sitio, la ficción alcanza su tercera temporada en Movistar+ convirtiéndose en comedia de referencia en España.

Resulta interesante escuchar la historia detrás del éxito de esta comedia gamberra y atrevida que sus creadores, Álvaro Fernández Armero y Juan Cavestany, no dudan en definir como "ese proyecto que en el futuro uno cuenta en plan 'batallita' porque al principio nadie lo quería".

La irreverente comedia que cuenta la historia de una pareja de metepatas empedernidos alcanza su tercera temporada elevando la vergüenza a nivel nacional. Sus protagonistas, Jesús (Javier Gutiérrez) y Nuria (Malena Alterio), seguirán protagonizando situaciones bochornosas que sonrojarán, a partir del próximo 14 de febrero, a aquellos espectadores que se atrevan a mirar y a "pasarlo mal" siendo testigos de las torpezas de esta particular pareja.

Diez años de odisea

La primera temporada de la serie se estrenaba en 2017 como una ficción original de Movistar +, quien supo ver el diamante en bruto que se escondía debajo del título "Vergüenza". Sin embargo, antes de llegar a su plataforma soñada, la comedia buscó su lugar de cadena en cadena hasta que sus creadores, sin demasiadas esperanzas por lograr que fuera emitida, se plantearon adaptarla como obra de teatro e incluso como película.

Así lo explican Fernández Armero y Cavestany en una entrevista concedida a EFE, en la que ambos coinciden al reconocer que los primeros pasos tras escribir la serie fueron toda una odisea.

"Cuando hicimos el piloto, allá en el año 2008, el año de la crisis, nosotros estábamos en total crisis a todos los niveles. Estábamos haciendo algo y no sabíamos muy bien por qué, porque la salida era absolutamente nula", apunta Fernández Armero.

Y añade: "Lo hicimos por alguna necesidad vital, me imagino, por una necesidad terapéutica, sin ninguna esperanza. Luego, lo que son las cosas, pasado el tiempo es ahora lo que nos da de comer".

En esa misma línea, la actriz Malena Alterio cuenta a EFE que fueron las particularidades de la serie las que echaron atrás el proyecto en muchas cadenas: "La serie tuvo muchos novios, muchas novias, a la gente le gustaba, pero no había hueco porque es una serie muy especial, por la duración, por el tipo de humor, por los guiones· Apareció Movistar y ahí sí que encajamos, fue como un traje hecho a medida".

Javier Gutiérrez, indiscutible

Un traje hecho a medida es también el personaje de Jesús, metepatas profesional, para un actor como Javier Gutiérrez. No por dicha condición de bocazas e inoportuno, ni mucho menos, sino por la capacidad de Gutiérrez para asumir retos de alto voltaje.

Javier era el actor que debía encarnar al incómodo Jesús. Así lo veían sus creadores desde el inicio. "En seguida surgió Javier Gutiérrez, al instante. No hubo ni el más mínimo debate. Venía como impuesto de forma mágica", admite Fernández Armero, quien ha recibido el aplauso de la crítica tras su película "Si yo fuera rico", estrenada el pasado mes de noviembre.

Un Javier Gutiérrez, ganador de dos Goyas a mejor actor principal -"La isla mínima" (2015) y "El autor" (2017)-, que define la serie como "nada complaciente" para el espectador, algo que Alterio no duda en subrayar: "Hay gente que no la puede ver porque le resulta incómoda, pero hasta eso me halaga".

Dentro de la conversación con su compañera de reparto, Javier añade que la serie, a pesar de presentar situaciones "muy bochornosas" e "incómodas", no deja de ser "una radiografía de este país".

"Es un salto sin red para el espectador, que lo coloca en situaciones muy bochornosas, muy incómodas, pero muy reconocibles porque, aunque creo que el espectador no empatiza con los personajes, sí que es cierto que todos tenemos dentro un poquito de Nuria y Jesús. Es una radiografía de este país", indica el actor.

Giro argumental

En relación a la trama de la tercera temporada es Malena Alterio, quien borda la interpretación de un personaje como el de Nuria, contagiada por las meteduras de pata de su marido, la que nos adelanta qué dirección tomarán las vidas de los protagonistas: "Es un giro radical. Hay un gran acontecimiento cuando empieza la temporada que hace que Jesús se convierta en vergüenza nacional".

Es Gutiérrez quien termina de dar las claves de esta tercera entrega: "Había que darle a los espectadores una cosa diferente. En la tercera (temporada) ya había que dar otra cosa y ahí entra un tono de cine negro, de thriller, de suspense, que va a sorprender muchísimo a los espectadores y que, para mi gusto, hace que sea la más redonda de las tres".

Un tercera parte "redonda", definición también expresada por Fernández Armero, que cierra con seis nuevos capítulos que verán la luz al completo a partir del próximo 14 de febrero en Movistar +. Una nueva oportunidad para seguir pasando vergüenza a costa de una pareja de metepatas sin parangón.